Siempre que termina el año, me replanteo mi evolución y echo la vista atrás.
Ojalá y no existiera el covid, ojalá y no hubiéramos perdido a tanta gente en el camino, ojalá y los gobiernos olvidaran sus propios Egoísmos pandemicos a la carta, ojalá y tuviéramos empatia en lugar de poca vergüenza, ojalá y en vez olvidar la mascarilla porque ya todo ha terminado cuidasemos más a todo el personal sanitario y no sanitario que está resistiendo el chaparrón por todos nosotr@s.
Ojalá y no hubiéramos perdido a Verónica Forque, aunque, perderla haya supuesto que la Salud Mental y el suicidio ocupen portadas y programas y se hable del estigma y del auto estigma...
Mientras el 21 agota sus últimos minutos, sólo puedo dar las GRACIAS hoy y siempre por la vida, por el aprendizaje y el camino. Por el cariño y amor recibido, por el dolor vivido, por las oportunidades encontradas y las posibilidades vividas. Por todos los caminos emprendidos y decididos, por todos los FUEGUITOS lindos que alumbran mi cielo. Por los FUEGUITOS que me alumbran el andar desde donde ya no están, por mi genealogía querida...
Deseo un año saludable y nutritivo, sano y amoroso, empatico y emotivo. Más solidario y más justo.
Deseo Luz para La Cañada y dignidad para las personas en exclusión.
Que la INCLUSIÓN sea real y efectiva.
Que la VACUNACION sea un derecho y no un lujo de países desarrollados y privilegiados...
En fin, gente linda, abrazos al alma y que el año sea como dejemos que sea, al Universo hay que ayudarlo : no todo se resuelve porque sí.
GRACIAS A LA VIDA