Las nuevas tecnologías y yo...no hay manera de ser capaz de escribir una entrada desde el móvil, no me inspiro y por eso, ni lo intento. Que gusto tener el espacio en casa, con el ordenador de mesa y mis emociones a la luz para que me nazca una entrada en condiciones.
Podemos decir que mi relación con el SIDA está muy relacionada con mi vocación al trabajo social. Para quien no lo sepa, yo iba para periodista y en el último minuto, decidí trabajo social. La razón fue la gente con la que crucé en la calle y en un comedor social en el que comencé un voluntariado (que palabra tan tonta y carente de sentido a día de hoy).
Allí me encontré con la Verdadera realidad, esa de la que habla Freire...y allí descubrí que ya encontraría el modo de escribir lo que veía (mira, he conseguido los dos objetivos¡¡)...
Y ahí llegaron los poemas de EL MENDI y de
SÍNDROME DE ABSTINENCIA, de Vendo mi cuerpo, ...
y todos los poemas sociales que pudieron regalarme con sus vidas
y que yo he seguido regalando estos años...
El caso es que empezaron a tejerse los lazos con gente que "se moría de Sida", estaban investigando tratamientos...y luego, me asomé a Apoyo positivo, y allí empezamos con un taller literario (otra vez las palabras) y el autoempleo y el empoderamiento (ya entonces, andaba yo usando esos términos)...de todas estas andanzas han pasado ya más de 20 años, entre que terminé la carrera y dejé apoyo allá por el 2001, pues eso 13 años. Después me crucé de nuevo como formadora para personas que trabajan el VIH: otro perfil, otra realidad...de nuevo, asomándose por pujar....Y ahora en este nuevo trabajo, cada semana, unos cuantos casos...y yo encantada: de escuchar la resiliencia, el poderío, la fuerza y ese estigma oculto que la sociedad sigue marcando en sus pieles como si fueran Reses de ganado.
El día que el VIH se convierta en una enfermedad tan crónica como la diabetes, entonces no habrá que pensar en el estigma.
El día que en el mundo la gente no se infecte de VIH, entonces, dejaré de pensar que esta enfermedad que se ha llevado a tanta gente por delante, ha dejado paso a otras y a una cronicidad. Pero de momento, seguimos teniendo prácticas sexuales arriesgadas que
nos parecen tan tan divertidas...
seguimos sin implementar planes de salud reproductiva y sexual en países que lo necesitan...
seguimos cargándonos la educación afectivo sexual de las escuelas...
Hay más motivos para seguir peleando cada día y para empoderar a quienes hoy la sufren? Yo si los tengo:
OTRO MUNDO ES POSIBLE.
Llamadme utópica, pero para eso sirve, para ANDAR LA VIDA.
Os dejo por aquí una lección de vida: Kike Poveda y su Tiras de mi piel. Ahí es na'
No hay comentarios:
Publicar un comentario