Cada día, cuando despierto y la persiana deja pasar cuidadosa los primeros rayos del sol, amanece en mí un nuevo día. Decía una canción de Lole y Manuel: El sol joven y fuerte ha vencido a la luna que se aleja impotente...La luna ahora camina hacia la oscuridad. El sol va tomando posiciones en el cielo y a pesar de la "nubosidad variable" que desea que se rinda, se llena de fuerza y vence en el firmamento. ES un lujo sentir esa luz en la frente, bañándote por fuera e iluminando tu hondo ser. Por eso, cada amanecer SONRIO y me digo a mi misma: vale la pena ¡¡ Cada instante y cada precioso momento que compartimos con quienes amamos, cada sencillo pensamiento que acude a nuestra cabeza, cada mirada que recogemos de las personas que nos rodean,...merecen una sonrisa tan inmensa como la de la pintura urbana que recoge esta foto: una sonrisa amplia, generosa, inudada de luz y de energía. La misma con la que yo la miro desde abajo, tan pequeñita a su lado en este rincón de las calles Lisboetas. Atenta a todo, a cada paso que doy, a cada persona con la que me tropiezo. Así son las personas artistas, eso escuché ayer en una conversación absurda donde las halla. Me lo aplico: observación, creatividad y toda la luz por recoger y por volcar de nuevo en el mundo. Ya Freire lo decía: La verdadera realidad no es la que es sino la que está pujando por ser. Ahí es nada, busquen otras realidades, exploren nuevas miradas...y cuando descubran lo que yo he descubierto, me lo cuentan. Buen día de COLORES. MUCHA ENERGÍA Y MUCHA LUZ.
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