En estos tiempos que vivimos en los que los afectos, que eran un bien de primera necesidad, aunque nunca los valoramos como tales,son un lujo lejano... cuesta pensar en el amor, mejor dicho, repensar el amor.
Ese amor romántico del detalle, de los bombones, de las noches románticas con la persona amada... son siempre una invitación a la reflexión sobre quienes somos y cómo amamos, o mejor dicho, cómo nos relacionamos en el amor.
Ese amor romántico que nos vendió Disney y los cuentos de hadas y príncipes azules aún sigue vigente en una sociedad patriarcal que sitúa a las mujeres como objetos de amor y no como sujetos protagonistas.
A veces vivimos un amor a la carta, un cuando quiero y como quiero.
Hay amores a distancia que nadie comprende. Amores abiertos, poliamores...
Cada quien ama desde donde sabe, desde donde ha aprendido, desde donde le han enseñado...
Sin embargo, en multitud de ocasiones nos topamos con personas atrapadas en amores dependientes, no igualitarios, celosos, posesivos y románticos que las y los destruyen como personas.
Y es que nos hemos olvidado del AMOR PROPIO, de la autoestima, del autocuidado... esperando que otro, otra resuelva nuestras carencias, nuestros miedos, nuestros dolores y en definitiva, una batalla que sólo cada quien puede librar consigo mism@. Y les aseguro que es el primer paso : queremos, valoraros, aceptarnos, autocuidarnos y bien tratarnos...
Si no, no seremos capaces de bien QUERER, de BIEN tratar y de amar desde el BUEN TRATO.
Por eso gente linda, el amor propio no es egoísmo, es construcción de dentro hacia fuera.
Quieranse y cuidanse. Ese es el mejor regalo que podemos hacernos y hacer al mundo 💜
La realidad se impone y mucho. Aunque quisiera olvidarme de todo y jugar a la Rayuela, o al Truquele...
A veces es inevitable ver todo lo que acontece y es imposible taparse los ojos y los oídos aunque lo intente. Doy fe. Lo intento cada día, trato de no ver noticias pero será que han de llegarme para bien o para mal por distintos cauces.
La noche de Luna llena, esa luna tan bella que se nos regaló, se me antojó pedir un deseo : sólo pedi COHERENCIA en quienes nos gobiernan para que protejan nuestra salud y no nos hagan correr más peligros.
La luna llena está más ocupada en conceder otros deseos y parece burlona incluso cuando, en las noticias, no sólo veo que no hay más restricciones en Madrid sino que, encima, se relajan.
El viernes a las ocho de la tarde, el tiempo invitaba a estar en la calle, dando un paseo por el Madrid de los Austrias y el Rastro descubría atónita un lleno absoluto en las terrazas y prácticamente sin hacer uso adecuado de su mascarilla.
¿Qué está por encima el ocio y la economía o la salud?
Sinceramente siento que se está dando prioridad a lo primero mientras otras CCAA han restringido toda actividad hostelera
Es como si aquí cantasemos por Bulerias mientras el resto del país lo hace con el dolor de los Tientos o el Martinete.
Sólo nos queda seguir siendo sensat@s y responsables y quedarnos en casa, autoconfinamiento por doquier.
Duelen las imágenes y las cifras, duelen las fiestas ilegales,
duele el descaro y el desdén con el que much@s están gestionando todo.
Entre tanto, sin solución en La Cañada
y burradas varias en los plenos del Ayto y Asamblea.